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| David Villa y Fernando Torres fueron letales en el equipo español |
París, 11 jun (PL) Las primeras impresiones de la Eurocopa-2008 de fútbol en Austria y Suiza son bastante predecibles: Alemania, Holanda y España brillaron con luz propia en el inicio, pero es difícil vaticinar si seguirán con igual ritmo.
Para los comentaristas franceses de las cadenas de televisión M6 y W9, la vocación ofensiva, ímpetu y juventud fueron los aspectos más sobresalientes en los triunfos de Alemania frente a Polonia 2-0, Holanda ante Italia 3-0 y España contra Rusia 4-1.
Sin embargo, es apenas el comienzo del torneo continental y si, por ejemplo, Francia se diera ya por eliminada, no abundarían como ocurre ahora un mar de cábalas y análisis que apuntan hacia un despertar de los subcampeones mundiales.
Lo cierto es que los germanos, contrario a su tradición de arranques grises, mostraron hermetismo en la defensa, con sus “torres” Mertesacker y Metzelder, velocidad por las puntas con Fritz y Lahm y olfato de gol con Podolski, Klose, Ballack y Gómez.
Una Alemania que se da el lujo de retrasar al propio Ballack y a Torsten Frings para garantizar una mejor recuperación de balones y que tiene a figuras en la banca o en el terreno como Jansen, Schweinsteiger, Kuranyi y Odonkor.
Será cosa de ver si esta maquinaria demoledora teutona es capaz de mantener la estabilidad en su juego en lo sucesivo, en especial durante su próximo duelo de mañana ante Croacia.
En frío se habla hoy del primer gol de Holanda frente a Italia, de Van Nisltelrroy en fuera de lugar, y a partir de ahí los actuales monarcas del orbe sacan sus conclusiones y tratan de minimizar el descalabro de apertura.
De cualquier manera, la realidad indica que sin el puntero Arjen Robben, quien presumiblemente jugará el viernes contra Francia, la “naranja mecánica” funcionó de maravillas y la velocidad y ritmo de los talentosos Snjeider, Van der Vaar, y Kuijt, impactaron.
Los galos no pueden darse el lujo de perder, como tampoco deberían aferrarse al cierre de una defensa lenta y pesada de movimiento. La esperanza se apoya en dos nombres, Patrick Vieira, el capitán, y el goleador Thierry Henry.
Tendría que ser otra cara de Francia, muy diferente y con otros jugadores más jóvenes, pero ya se sabe que en fútbol cada partido es capítulo aparte.
Por último, la espléndida España, aguerrida, dinámica y con mucho gol en los botines ayer con la tripleta de David Villa y uno de Cesc Fábregas, aunque con una escuadra de hombres muy técnicos como Iniesta, Xavi Hernández y Sergio Ramos.
¿Espejismos? La próxima prueba de la Furia Roja contra Suecia el sábado dirá mucho.
Empero, sin dudas, hay tela por donde cortar con el debut español y también, por supuesto de Holanda y Alemania.
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