Naciones Unidas (EFE).- La ONU estudia la construcción de refugios resistentes a los huracanes para el millón de damnificados por el sismo de Haití que viven en campamentos improvisados vulnerables a las precipitaciones que en unos meses marcarán el inicio de la época de lluvia, dijo hoy el organismo. La enviada especial adjunta de la ONU para Haití, Kim Bolduc, aseguró que el peligro que representan las lluvias torrenciales y el inicio en junio de la temporada de huracanes obligan a buscar albergues seguros para quienes han perdido su vivienda. "La gran preocupación son las próximas lluvias y nos hemos planteado construir algún tipo de albergue seguro o resistente a los huracanes", dijo en una conferencia vía satélite la número dos de la misión del organismo en Puerto Príncipe (Minustah).
Bolduc resaltó que esta alternativa es "obviamente una solución mejor, pero más cara y que se tardará más en realizar", ya que se necesitan materiales y equipamientos de construcción más pesados.
Un obstáculo a esta propuesta es la imposibilidad de utilizar por ahora la mayor parte de las instalaciones portuarias de la capital haitiana, que siguen todavía fuera de servicio a causa de los daños sufridos en el terremoto del pasado 12 de enero.
El temblor de tierra daño la mayor parte de los soportes de los muelles, por lo que no se pueden utilizar para amarrar barcos y proceder a su descarga, explicó.
"Traerlos por avión es muy caro, pero son muy necesarios", apuntó.
Asimismo dijo que el Gobierno haitiano ha indicado que preferiría colocar algunos de estos albergues en el centro de Puerto Príncipe, para que sirvan de refugio cuando empiece la temporada de lluvias.
También indicó que se buscan emplazamientos fuera de la ciudad en los que construir estos albergues, y a los que se evacuarían a las personas sin techo cuando haya alertas de lluvias y ciclones.
"Nos quedan uno dos meses, así que no tenemos mucho tiempo si las lluvias llegan temprano", agregó.
El Gobierno haitiano pidió hace dos semanas unas 200.000 tiendas de campaña familiares para dar refugio al millón de personas que viven casi al aire libre en campamentos improvisados.
Sin embargo, hasta ahora sólo unas 250.000 han recibido algún tipo de material, como lonas plásticas, y sólo hay unas 10.000 tiendas en todo el país, según la ONU.
Bolduc también advirtió en la conferencia de prensa que en los últimos días ha surgido dificultades en el cordón humanitario entre Puerto Príncipe y Santo Domingo a causa del deterioro de la carretera en el lado haitiano de la frontera.
Las lluvias que han caído en el interior del país en los últimos días han anegado repetidamente parte de la calzada, mientras que el tráfico pesado que soporta desde hace semanas ha agravado los daños causados por el sismo.
Por ello, explicó, ingenieros militares estadounidenses y técnicos de Naciones Unidas estudian la posibilidad de abrir una ruta alternativa para los cam
iones con ayuda humanitaria que llegan desde República Dominicana.En el aspecto de la alimentación, Bolduc aseguró que se ha hecho llegar comida a un 95% de los dos millones de personas necesitadas de asistencia alimentaria, en gran parte de los casos en forma de sacos de arroz.
Al mismo tiempo, agregó que, a medio plazo, será necesario aumentar la asistencia financiera al sector agrícola para aumentar la capacidad de autoabastecimiento del país. EFE
Bolduc resaltó que esta alternativa es "obviamente una solución mejor, pero más cara y que se tardará más en realizar", ya que se necesitan materiales y equipamientos de construcción más pesados.
Un obstáculo a esta propuesta es la imposibilidad de utilizar por ahora la mayor parte de las instalaciones portuarias de la capital haitiana, que siguen todavía fuera de servicio a causa de los daños sufridos en el terremoto del pasado 12 de enero.
El temblor de tierra daño la mayor parte de los soportes de los muelles, por lo que no se pueden utilizar para amarrar barcos y proceder a su descarga, explicó.
"Traerlos por avión es muy caro, pero son muy necesarios", apuntó.
Asimismo dijo que el Gobierno haitiano ha indicado que preferiría colocar algunos de estos albergues en el centro de Puerto Príncipe, para que sirvan de refugio cuando empiece la temporada de lluvias.
También indicó que se buscan emplazamientos fuera de la ciudad en los que construir estos albergues, y a los que se evacuarían a las personas sin techo cuando haya alertas de lluvias y ciclones.
"Nos quedan uno dos meses, así que no tenemos mucho tiempo si las lluvias llegan temprano", agregó.
El Gobierno haitiano pidió hace dos semanas unas 200.000 tiendas de campaña familiares para dar refugio al millón de personas que viven casi al aire libre en campamentos improvisados.
Sin embargo, hasta ahora sólo unas 250.000 han recibido algún tipo de material, como lonas plásticas, y sólo hay unas 10.000 tiendas en todo el país, según la ONU.
Bolduc también advirtió en la conferencia de prensa que en los últimos días ha surgido dificultades en el cordón humanitario entre Puerto Príncipe y Santo Domingo a causa del deterioro de la carretera en el lado haitiano de la frontera.
Las lluvias que han caído en el interior del país en los últimos días han anegado repetidamente parte de la calzada, mientras que el tráfico pesado que soporta desde hace semanas ha agravado los daños causados por el sismo.
Por ello, explicó, ingenieros militares estadounidenses y técnicos de Naciones Unidas estudian la posibilidad de abrir una ruta alternativa para los cam
iones con ayuda humanitaria que llegan desde República Dominicana.En el aspecto de la alimentación, Bolduc aseguró que se ha hecho llegar comida a un 95% de los dos millones de personas necesitadas de asistencia alimentaria, en gran parte de los casos en forma de sacos de arroz.
Al mismo tiempo, agregó que, a medio plazo, será necesario aumentar la asistencia financiera al sector agrícola para aumentar la capacidad de autoabastecimiento del país. EFE
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